Mi cambio de estilo | TULLE SKIRT

¡Hola amantes del estilo!

Os parecerá exagerado, pero el post de hoy lo llevo queriendo escribir desde que abrí el blog. Obviamente, este tema requería que pasara tiempo para poder echar la vista atrás con perspectiva ;) Muchas veces en este blog os he mencionado mi cambio de estilo, ese momento en que decidí cambiar mi ropa y empezar a vestir de una manera en la que me sintiera cómoda y bien vestida. Para hablar de ello he elegido un look que hace años no habría sabido combinar. De hecho estoy segura de que me habría comprado la falda (porque es preciosa) y se habría quedado colgada en el armario jajaja. Así que, ¡allá vamos!

Antes de abrir el blog me pasaba las horas visitando blogs de street style. Para mí era un mundo abierto: faldas de lentejuelas con deportivas, camisetas básicas con blazers, vestidos de noche con bombers, faldas plisadas con sudaderas... Cada vez que veía estas combinaciones tan casual me estallaba la cabeza. ¡Yo quería vestir así todos los días! Pero la ropa que tenía me mataba, no me inspiraba nada, me parecía sosa y anodina. No tiré todo (no podía), pero hice limpieza y dejé las prendas que podía aprovechar. Hice un cambio de armario paulatino pero con decisión, y todavía estoy en ello jejeje.

 

 

 

Para mí mirar blogs, revistas, Instagram o fijarme en las chicas que veía por la calle fue fundamental para mi cambio de estilo. Fue la mejor manera de sentirme más abierta a llevar ropa diferente a la que llevaba, y de acostumbrarme también a llevar determinadas prendas que antes no había llevado. Siempre había dividido la ropa en ropa elegante para ocasiones especiales (que al final no me ponía nunca) y ropa para diario. Pero me di cuenta de que tenía que buscar prendas versátiles, de diario y elegantes, y mezclar básicos con ropa más top para darle un toque casual a todo. El rollo effortless (sin esfuerzo) me fascina.

En el look que veis en las fotos llevo una falda de tul que tiene la elegancia del tul, y un corte al que es fácil darle un giro más sport. La he combinado con un jersey básico en negro de corte cropped, y con botines de piel efecto de serpiente. Elegí un abrigo muy básico que rebajara todo el look. Además tenía una comida en la Sierra de Madrid, y hacía frío a pesar del sol :)

 

 

 

Lo que tuve muy claro desde el principio, es que debía probar, probar, probar; y que en esto del estilo no hay normas. Las que me seguís desde hace un tiempo os habréis dado cuenta de que en este blog no me cierro a ningún tipo de estilo. Sobre todo soy fan de mezclar detalles de diferentes estilos. Eso sí, me gusta intentar darle a todas las prendas un toque casual y relajado. Esta siempre ha sido mi gran obsesión. Odio cuando llego a un sitio y la gente me mira: me miran el abrigo de leopardo, o miran mi falda de tul, o miran mis zapatos... No me entendáis mal, nunca me ha importado lo que piense la gente de mí, pero no soporto que me miren y el envoltorio les impida ver mi cabeza jajaja.

 

 

 

Lo que más me ha obsesionado en la búsqueda de mi propio estilo ha sido sentirme cómoda con la ropa que llevaba. La primera vez que me puse tacones cuando era jovencita no sabía andar con ellos, me notaba un caminar extraño y al final me hacía sentirme mal. Pues en este caso ocurre lo mismo, para mí es muy importante que la ropa no se me clave o no me impida moverme. También es cierto que algunas prendas hay que aprender a llevarlas. Pero otras quizá simplemente no encajan con nosotras. Así que básicamente, cuando estoy en los probadores de las tiendas levanto los brazos, me siento, camino, doblo las piernas... Soy todo un espectáculo jajaja.

 

 

¡Por fin he aprendido a comprar con cabeza! Después de la limpieza que hice hace dos años estoy bastante cerca de tener un armario decente. Aunque todavía voy arrastrando alguna prenda del pasado de la que debería deshacerme. Básicamente, voy surtiendo a mi armario según vea que me quedo sin ciertos básicos, y me doy algún capricho con determinadas tendencias. Hay prendas que me apasionan, que me persiguen en mis sueños, pero que todavía no he llegado a probar. Al final esto es un no parar de cosas chulas, y me toca elegir. Si no sería pobre, porque arrasaría jajaja. Siempre digo que me compraría uno de cada, y ¡es verdad! Pero no puede ser. Así que cada vez que veo una oportunidad intento invertir en zapatos y bolsos. Creo que la clave está realmente ahí, y que el mismo outfit combinado con diferentes zapatos queda totalmente distinto. Si tenemos poca ropa mejor ir a la sección de calzado jajaja.

Por último os quería decir que mi máxima, aparte de la comodidad y de ir en clave relajada, es vestir con looks reales, un street style que se pueda utilizar en el día a día y no solo en las semanas de la moda. Los looks que veo en estas ocasiones me parecen muy inspiradores y artísticos, que creo que es lo que deben ser. Y en parte me gusta que mis looks tengan ese espíritu, pero siempre en una clave de realismo. Intento encontrar el equilibrio perfecto entre estos dos mundos, por eso siempre fotografío los outfits que creo que os pueden inspirar en algún sentido. Aunque solo sea para decir "yo esto no me lo pongo ni loca". 

¡Espero que os haya gustado el post! Me apetecía compartir mis reflexiones sobre esta experiencia, ya que al fin y al cabo el objetivo de este blog de estilo siempre ha sido documentar la evolución de mi estilo a lo largo del tiempo. Y todavía me queda camino. Contadme, ¿cuál es vuestra máxima a la hora de vestir? ¿También le tuvisteis que meter tijera al armario?

Nos vemos en el siguiente post con un outfit más primaveral (eso espero).

¡Saludos estilosos!

J.  

¿Quieres saber más? Sígueme en redes sociales: Instragram y Twitter
                                        Inspiración de outfits | Nailart | Lifestyle